Aprendizaje en contacto directo con el ambiente

Por tercer año consecutivo, estudiantes y docentes del Profesorado de Educación Secundaria en Biología llevaron a cabo un viaje de estudio al Parque Nacional Iberá, en una experiencia de aprendizaje, que les permitió conocer una de las áreas naturales con mayor biodiversidad de la Argentina.

“Consideramos que las salidas de campo constituyen una herramienta pedagógica insustituible para los jóvenes, ya que permite que puedan vivenciar el aprendizaje en contacto directo con el ambiente. La actividad favorece la motivación, el interés y la reflexión crítica sobre la importancia de la biodiversidad y posibles problemáticas en torno a su conservación”, explicó la coordinadora del Profesorado en Biología, Mgtr. Alicia Tetzlaff.

El viaje se realizó el pasado jueves 10 de octubre, e implicó una cuidada tarea de planificación previa de los itinerarios, que incluyó charlas a cargo de los guardaparques del Portal Norte Cambyretá. Durante la jornada se hicieron actividades como safaris fotográficos, caminatas de interpretación y avistajes de fauna y flora silvestre. 

Tetzlaff destacó que la actividad se realizó en al marco de una propuesta intercátedra que involucró a las Unidades Curriculares “Diversidad Animal”, “Ecología” y “Taller Integrador II”, todas del segundo año del Profesorado en Educación Secundaria en Biología.

“Algunos de los objetivos (del viaje de estudio) fueron identificar y describir las principales características de la biodiversidad existente; reconocer su valor intrínseco y sus beneficios. Poder analizar los principales problemas que sufren este tipo de ecosistemas, las consecuencias de una alteración de los mismos y posibles desafíos que enfrenta su conservación y uso sostenible”, especificó la docente.

“La diversidad de fauna y flora se aprecia a simple vista.  Algunas son exclusivas del lugar. Los esteros del Iberá son un patrimonio de la Argentina que alberga gran variedad de especies endémicas (propias de la región), muchas amenazadas y emblemáticas, como los ciervos de pantano”, contó Tetzlaff.  Y, en ese sentido, detalló que “como objetivos más específicos, se efectuaron tareas de observación, registro, análisis e investigación científica relacionada con la biodiversidad.  Pero también fue importante la generación de espacios de intercambio y socialización de saberes entre docentes y estudiantes en espacios extraáulicos”.