En el ISARM se desarrolló el primer encuentro del Ciclo de Formación: “Gestión Directiva de la Escuela Católica”

El pasado jueves 27 de agosto, en el Instituto Superior Antonio Ruiz de Montoya, se dio inició al Ciclo de Formación denominado “Gestión Directiva de la Escuela Católica”, organizado por el Obispado de la Diócesis de Posadas; la Junta de Educación Católica; la Secretaría Episcopal para la Educación Católica y esta Casa de Estudios. En el primer encuentro se abordó el tema “Educar hoy y mañana, una pasión que se renueva”.

Presidieron la apertura de la jornada Monseñor Juan Rubén Martínez, Obispo de la Diócesis de Posadas; el Presbítero Alejandro Cañete, Asesor Espiritual de la Junta de Educación Católica; la Presidente de la Junta, Magíster María Eva Lescano de Borkoski y Rectora del Instituto Superior Antonio Ruiz de Montoya; el Licenciado Rubén Stupniki, Vicepresidente de la Junta y Rector del Instituto José Manuel Estrada; el Licenciado Luis Bogado, Secretario Episcopal para la Educación Católica. Acompañaron en la oportunidad autoridades educativas de la provincia como así también del ISARM junto con Representantes Legales, Rectores, Directores de Estudios, Jefes de Departamento, Coordinadores y otros referentes docentes con perfil de gestión de los institutos educativos de la provincia de Misiones.

La oración inicial fue guiada por el Presbítero Alejandro Cañete, quien en la misma recordó que la labor educativa es un servicio, que no debemos olvidarnos de ello y que hay que servir con amor a los educandos, tal como el Señor nos enseñó a servir y amar.

Seguidamente, la Presidente de la Junta de Educación Católica y Rectora del Instituto Montoya, Magíster María Eva Lescano de Borkoski, dirigió unas palabras a los presentes. Comentó que la realización de este Ciclo surge del mismo pedido de los directivos que participan en los retiros de Equipos de Conducción que se realizan al inicio de año y que “muchos manifiestan lo positivo que es intercambiar con nuestros pares las realidades de las distintas instituciones y al mismo tiempo han expresado también la necesidad de incrementar este tipo de encuentros para llevar adelante nuestra misión. Por otra parte, en la Asamblea Diocesana 2014, los asambleístas pertenecientes al área de educación han enunciado desafíos para tener en cuenta y responder coherentemente a la intención evangelizadora de las escuelas católicas. Y han enunciado concretamente desafíos que interpelan mucho, como por ejemplo, el de potenciar los lazos interinstitucionales. Cito casi textualmente lo que se enunció en el cuadernillo de conclusiones, ellos dicen ‘que las escuelas salgan de su aislamiento y que se abran a la posibilidad del diálogo con el otro’… Esto nos interpela y nos hace mirar hacia nuestras propias realidades. ¿Qué nos pasa a veces que estamos queriendo llevar adelante la misión, pero no somos capaces de superar algunas competencias académicas interinstitucionales? Y buscamos de afianzar el propio terreno particular, perdiendo de vista que la misión es una y que todos debemos bregar por esa única misión…”. También la Magíster Lescano de Borkoski planteó que en la misma cotidianeidad de la tarea se presentan las preguntas sobre si el trabajo se está realizando bien, si hay coherencia “entre lo que predicamos y lo que hacemos”, si realmente se lleva adelante una formación integral o si la misión que se tiene en cada institución educativa es la columna vertebral que guía la labor. “No siempre tenemos las respuestas positivas, ¿cómo hacemos para superar las brechas que a veces existen entre el decir y el hacer? Hablamos de misericordia, hablamos de amor, hablamos de apertura permanente de diálogo con el otro y se nos disparan permanentemente conflictos de relaciones interpersonales, conflictos de competencias laborales. Todo eso necesita de mucha fortaleza, de mucha coherencia en la vida de todo aquel que está en la conducción. Entonces, es propicio contar con estos espacios donde juntos podamos potenciar nuestro hacer. …”. Respecto de los objetivos de este tipo de encuentros manifestó que son, fundamentalmente dos: “en primer lugar, generar un espacio de diálogo, de intercambio, que se inicia hoy… En segundo lugar, respondiendo a lo que fue pedido en la Asamblea Diocesana del año pasado, generar verdaderos lazos entre las instituciones católicas, que estemos en permanente diálogo, que hablamos sobre esas cuestiones que nos preocupan…”.

Luego, el Obispo de la Diócesis de Posadas, Monseñor Juan Rubén Martínez, dio la bienvenida. “Con mucha alegría quería darles a todos la bienvenida. ¡Qué lindo es que podamos estar juntos! Refleja y revela el compromiso que ustedes tienen y que también necesitamos de ese compromiso para poder caminar sobre un tema tan clave, tan fundamental como es el educativo… Qué lindo el lema que eligieron: ‘Educar hoy y mañana, una pasión que se renueva, que surgió del documento (sobre el que se desarrollará la capacitación), pero cada palabra tiene sentido… ‘Educar hoy’ es como una clave de compresión de la realidad en la que vivimos, tener claro el rol, la vocación del educador, nuestras metas y objetivos que tenemos en el educar, pero también entender los contextos culturales, epocales que tenemos, a los que tenemos que responder en el hoy y en el mañana. Tener un discernimiento, a veces no tanto en las coyunturas, lo inmediato, lo urgente, que no nos permite reflexionar suficientemente, ver dónde estamos parados, hacia dónde vamos… Estos momentos, estos espacios nos ayudan para situarnos, ubicarnos, tanto en lo personal, en lo institucional, como en las respuestas que tenemos que dar al momento histórico que vivimos… Otra palabra que me parecía clave es la de la ‘pasión’, porque todo esto sólo se puede hacer cuando hay pasión. La pasión surge de la vocación, una de las enfermedades de las cuales, a veces, podemos nosotros contaminarnos es la indiferencia, ‘esto no me interesa’, es como una enfermedad que puede ir extendiéndose, por ello es necesaria la pasión. A veces nos podremos equivocar, pero es clave tener pasión, con la pasión nosotros podemos renovarnos y realmente vivir de una manera comprometida. Y también sin pasión no podemos tener alegría y gozo por lo que vamos viviendo en nuestro día a día en nuestras instituciones, en nuestro trabajo, en lo que hacemos... Ojalá que tengamos pasión, porque con certeza, si tenemos pasión seremos felices en lo que hacemos.”

La iluminación central estuvo a cargo del Presbítero Doctor Fernando Fornerod quien se refirió a los aportes de la Exhortación Apostólica Evangelii Gaudium en la educación católica y las líneas del Instrumentum laboris “Educar hoy y mañana. Una pasión que se renueva”. “En dicho Instrumento se subrayan los puntos de referencia esenciales de la Declaración Gravissimum educationis y de la Constitución Apostólica Ex corde Ecclesiae, las características fundamentales de las escuelas y de las universidades católicas, y se trazan los desafíos a los cuales las instituciones educativas católicas están llamadas a responder con un proyecto propio y específico.”¹

Una vez finalizada la disertación del Pbro. Doctor Fernando Fornerod, se invitó a los asistentes a dirigirse a las aulas, previamente asignadas, donde se trabajó en grupos sobre los siguientes ejes: Identidad y Misión, Sujetos, Formación, y Desafíos y prospectivas.

A las 11 de la mañana nuevamente los participantes se reunieron en el Auditórium del Montoya y allí se presentaron las reflexiones de lo trabajado en las aulas y el padre Fornerod realizó un cierre.

¹ CONGREGACIÓN PARA LA EDUCACIÓN CATÓLICA EDUCAR HOY Y MAÑANA. Una pasión que se renueva. Instrumentum laboris.

El ciclo continuará con una jornada más este año

Este ciclo de formación comprende cuatro jornadas, a realizarse en dos cuatrimestres, el primer encuentro fue el desarrollado el 27 de agosto y antes de finalizar el presente año se efectuará el segundo. Los dos encuentros siguientes se llevarán a cabo el año próximo, entre los meses de abril y julio.