Misa de inicio del Ciclo Lectivo

Estudiantes y profesores de la Sede Campus del Instituto Superior Antonio Ruiz de Montoya participaron de una misa, en el comienzo del primer cuatrimestre de clases. En ella, se pidió a Dios fortalecimiento en el camino espiritual y también sirvió de preparación para la Pascua de Resurrección. 

“Los invitamos a poner la mirada firme en Cristo y que Él sea su guía, apoyo, equilibrio y esperanza”, expresó la rectora del ISARM, la Magíster Natalia Navas, en un mensaje dirigido a los jóvenes, al final de la celebración.

En la misa también se agradeció por el docente Armando Acosta, por su testimonio de humildad y servicio en el Profesorado de Educación Física, quien desde abril gozará del beneficio de la jubilación.

El Presbítero Javier Krawczuk, quien tuvo a su cargo la celebración, que se efectuó en la mañana del martes 26 de marzo, recordó a los estudiantes la importancia del tiempo de Cuaresma y de la Semana Santa, que culmina con el domingo de Pascua de Resurrección. Sobre todo, destacó la preparación necesaria para recordar la Pasión y Muerte de Cristo y su significado. Al respecto, remarcó la necesidad de leer la Palabra de Dios para “entrar en sintonía” con la celebración, además de “cultivar nuestra espiritualidad con la oración y la escucha”.  En tercera instancia, “cumplir los mandamientos”, sobre todo el que indica que “amar a Dios se corresponde con amar al prójimo”, hasta llegar a la instancia, relacionada con “dar frutos, porque las obras son importantes, sobre todo hacer el bien a los demás”. 

Con respecto a la Semana Santa, Krawczuk destacó la humildad de Jesús. “Nos hace sentir su No-Ser como los jefes de este mundo”, hasta su entrega final habiendo mantenido firme su convicción “sabiendo lo que le iba a ocurrir”. 

“Vienen celebraciones fuertes”, advirtió el religioso y, por ello mismo, invitó a los estudiantes, a participar. 

La rectora del instituto Montoya, dio la bienvenida a los jóvenes, tanto a los que “ya están transitando el profesorado”, como también a los que “inician su primer año”.

En ese contexto, Navas subrayó que la formación que propone el ISARM va más allá de lo meramente académico, científico o informativo. “Consideramos que debe trascender estos planteos y pensar en el hombre como un todo (…) que en su formación integral pueda estar presente la libertad y la responsabilidad, porque educar es humanizar”. 

“La sociedad actual reclama profesores dispuestos al diálogo, la participación, el trabajo en equipo, la vida en comunidad. Que no solamente se destaquen en conocimientos, sino que también amables, cercanos de corazón, empáticos y solidarios”, agregó la rectora. 

Por último, Navas llamó a la acción a los jóvenes: “… sean estudiantes capaces de generar cambios positivos para nuestra sociedad, pero sentando las bases en el respeto y, sobre todo, en el amor”.