¿Cómo formar médicos en contra de la vocación médica y de la evidencia científica?

El Médico Pediatra y Vicerrector Académico de la UCaMi, Pablo Levatte¹, estuvo participando el pasado jueves 24 de mayo de la 13° jornada en el plenario de comisiones del Congreso de la Nación, en el cual el debate en torno al aborto punible continúa.

Debajo compartimos el texto completo de la exposición realizada por Levatte.

 

Buenas tardes señores Diputados y público en general, agradezco la posibilidad que me han dado de estar acá.

Soy Pablo Levatte, Médico Pediatra y hace más de 20 años que trabajo en la formación de Médicos.

Como representante de una Universidad formadora de médicos y de Licenciados en Obstetricia, quiero decir que estamos a favor de la vida, DE LAS DOS VIDAS tanto de la madre como del niño, es por eso que nos expresamos en contra del proyecto de la legalización del aborto.

Cuando los médicos elegimos la carrera de Medicina, siempre está presente la vocación de servicio y de salvar vidas.

La vocación médica en definitiva es responder a ese llamado que nos lleva a abrazar esta profesión: el llamado a ser útiles a la sociedad y a proteger a nuestros pacientes. 

Sin duda, contar con profesionales de la salud comprometidos, coherentes y respetuosos de la vida, construirá una sociedad mejor. Gran parte de ello depende de la formación adquirida durante la carrera. 

Hace varios años en Misiones, me sumé al trabajo de un gran equipo de personas que soñaban con la formación de médicos y Licenciados en Obstetricia en la provincia.

Lo primero que recordé fue el Juramento Hipocrático. Ya Hipócrates, el padre de la Medicina, hace más de 2500 años reforzó el deber médico de no hacer daño,  no matar y defender la vida por más pequeña que sea, como se ha escuchado en varias exposiciones en este recinto.

Desde el año 2012, la Organización Mundial de la Salud, reforzando el principio “Primum Non Nocere” de dicho juramento, promueve la formación en la  seguridad de la atención del paciente desde el inicio de la carrera.

El concepto de formación en La Seguridad del Paciente planteada por la OMS es el intento consciente de evitar un daño innecesario real o potencial asociado a la atención sanitaria.

Ahora bien, el Estado Argentino a través del Ministerio de Educación, Ciencia y Tecnología de la Nación (Resolución N°1314), exige a todo Centro de Altos Estudios que desee formar médicos elevados estándares para la acreditación de la Carrera, cumpliendo con la nómina de actividades profesionales reservadas para el título de Médico. En ninguna de ellas, el título de médico lo habilita a matar. Es más, en el marco de la competencia Profesionalismo planteada en la Resolución 1314, los alumnos deben, cito: “Buscar ante todo mantener la salud del paciente”, y en la dimensión Pensamiento científico e investigación, los alumnos deben, cito: “Utilizar el pensamiento crítico, razonamiento crítico, medicina basada en la evidencia y la metodología de la investigación científica en el manejo de la información y abordaje de los problemas médicos sanitarios”.

Luego de todos estos días de debate es redundante afirmar que la ciencia ha demostrado que la vida comienza en la concepción.

Si está claro lo que ha demostrado la ciencia, lo que ha marcado Hipócrates en la antigüedad, los lineamientos actuales de formación planteados por la OMS y los estándares de la Nación Argentina para la formación en competencias del médico: SEÑORES DIPUTADOS: Les pido por favor que nos expliquen: ¿Cómo vamos a enseñar a nuestros alumnos, en la Cátedra de embriología humana en primer año de la carrera lo maravilloso del desarrollo embrionario si más tarde estarán obligados a negar la vida que les consta innegable?

¿Cómo podremos, transmitirles la importancia del rigor científico en cada uno de sus actos, cuando el proyecto de ley que estamos debatiendo los obligará a ir en contra del saber científico?

¿Cómo podremos transmitirles la importancia de adquirir los conocimientos y las competencias para el adecuado cuidado de una mujer embarazada en cada control obstétrico para que pierda todo sentido ante un aborto voluntario provocado por sus propias manos?

¿Cómo se imaginan una sala de obstetricia con alumnos que en una habitación aprenden y realizan todos los esfuerzos necesarios para asistir un parto con el máximo fin de proteger a la madre y al niño y; en el cuarto contiguo, el mismo equipo mata a un niño, tan inocente como el anterior, teniendo como resultado un bebé muerto y una madre que sufrirá consecuencias evitables toda la vida?  Como ya lo han demostrado colegas, con sólida evidencia científica, en este recinto.

¿Cómo les explicaremos a nuestros alumnos que en un determinado acto médico, ya no se procura la salud, sino la muerte de un ser humano indefenso, también paciente?

SEÑORES DIPUTADOS, tengan en cuenta que si aprueban este proyecto de Ley tendremos que enseñarles a los profesionales de la salud, que existen distintos niveles de pacientes. Qué la vida se defiende a veces y qué otras veces se elimina porque una ley que ni siquiera contempla la objeción de conciencia personal ni institucional, los obliga a cometer homicidios como parte de su trabajo.

En definitiva: Señores Diputados, si ustedes votan a favor de esta Ley, necesitamos que nos expliquen a todos los que estamos a cargo de la formación de médicos del país: ¿Cómo vamos a hacer en las Universidades para educar en contra de la vocación médica y de la evidencia científica?

¿En qué tipo de sociedad nos vamos a convertir si les enseñamos a los futuros profesionales de la salud que no hay que respetar la vida del ser humano indefenso?

Señores Diputados: ARGENTINA LOS NECESITA. Necesita que en su voto estemos representados todos, los que tenemos voz y los que no la tienen.

ARGENTINA NECESITA QUE CON SU VOTO SE CUIDEN LAS DOS VIDAS.

Muchas Gracias.

 

Para los que quieran escuchar la presentación pueden ingresar a https://youtu.be/F6FdxVDtCkg

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¹ - Pablo Levatte es Médico, Diploma de Honor de la Universidad del Salvador. Profesor en Medicina de la Facultad de Ciencias de Educación y Comunicación Social de la USAL. Especialista en Pediatría del Ministerio de Salud y Ambiente de Argentina y del Colegio Médico de Misiones. Miembro titular de la Sociedad Argentina de Pediatría. Actualmente es Vicerrector Académico de la Universidad Católica de las Misiones.