26 de Septiembre del 2021 | Centro de Pastoral Institucional
Reflexión del Evangelio Dominical
"El que no está en contra de nosotros... el que sea ocasión de pecado para nosotros..."
En este relato, Jesús ensaña a los suyos a discernir lo que viene de Dios en este mundo. Les dice: "¡Nadie que haga un milagro en mi nombre puede hablar mal de mí, después..." de lo contrario, es falso. Les enseña a estar atentos, para discernir y no ser un obstáculo para la acción del espíritu de Dios en todos. Este es el verdadero celo apostólico: estar atentos para discernir y apoyar a todo aquél que siente el impulso de Dios para proclamar a Cristo. Sanar, enseñar, cuidar... esa es la misión de la Iglesia.
Luego, Jesús les dice: "El que sea ocasión de pecado para otros..." es necesario y urgente corregirse diariamente para no ser ocasión de pecado para otros. Las palabras, los gestos, las actitudes, el estilo de vida, los gustos, las obras, sino nacen de la verdad y de la caridad, son ocasión de pecado para otros.
Examinemos nuestro estilo de Vida Cristiana. Podemos preguntarnos por qué hay tanta incredulidad en el mundo de hoy... ¿Será que nuestra vida proclama a Cristo?